Justo a las puertas de la París Fashion Week, no podía dejarme en el tintero algún desfile de la Milán Fashion Week. Milán es la Fashion Week que menos me atrae, porque los diseñadores que presenta no están entre mis favoritos, pero siempre hay algún desfile que acaba por gustarme, claro que quién puede odiar a Giorgio Armani.
Tras los caleidoscópicos e imposibles colores de Prada, el Versace y el Emilio Pucci de siempre, el encaje y las flores y la esencia italiana de Dolce & Gabbana , tocaba ver un clásico: Armani.
Mr. Armani ha presentado una colección, que al contrario que otras muchas, resulta práctica y bonita, además de muy ponible, sin olvidar claro la teatralidad para algunos looks.
Discretos y elegantes looks de chaqueta protagonizaban el principio del desfile, que se transformaban poco a poco dando paso a colores vivos como el rosa chicle.
Esta chaqueta es de mis piezas favoritas de la colección.
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Guiños al geometrismo de su colección Spring 2013 Couture también cruzaron la pasarela.
En parejas salían los look, con el mismo diseño, y color cambiado, un recurso muy utilizado por Armani.
Preciosos estampados en tonos verde, coral y rosa tomaban la pasarela
(admito que me han encantado los vestidos cortados a láser).
Finalmente, tres pamelas tomaban la pasarela para cerrar el desfile.
Pero no puedo terminar la entrada sin poneros todos los detalles, empezando por los bolso que Armani presentó en esta colección.
Por supuesto no pueden faltar los zapatos.
Y finalmente, el Backastage. Imprescindible.
¿Qué os ha parecido?
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