No sé exactamente que es lo que tiene Allison Williams (o las actrices de "Girls") que ha conquistado el corazón de Giambattista Valli, pero independientemente de lo que sea, diría que es una relación muy bien avenida porque ambas partes consiguen brillar con una luz maravillosa cada vez que se juntan. Lo vimos en los Emmy 2014, y se repitió en la noche de la Gala del Met en la que Williams lució un vestido modificación de uno presentado en la Spring 2015 Couture cuyo cambio de color no solo le resta una dulzura más propia de Taylor Swift, sino que lo dota de una fuerza mucho más favorecedora y lo hace más apropiado para la gala.
Pero una vez más, no excesivamente apropiado porque puede que el rojo fuera el color de la noche, pero no por ello pudo decir que este vestido encaje especialmente bien con el tema.
Por otro lado es innegable que la actriz dio ese momento mágico de princesa que esta alfombra roja necesita y que no puede faltar en el Met, en el que metros de tul caminan por estas escaleras, aunque si hablamos de tul rojo, Valli y las escaleras del Met, la imagen de Doutzen Kroes en 2011 es difícil de superar.
El look de belleza destaca por su naturalidad, con un recogido que da un aspecto casi casual y un maquillaje centrado en darle importancia a la mirada, con un resultado muy favorecedor.
Sin embargo, los ojos se me van al precioso broche de aspecto vintage que decora el cuello de su vestido y que firma Fred Leighton. Creo que es uno de esos detalles que marcan la diferencia y que hacen el look algo más especial, y a mi la verdad es que me ha enamorado.
Aunque puede que en un aspecto si que supere a Doutzen y es el hecho de que la modelo desprende una naturalidad admirable, con la cual saca adelante un vestido que en esta alfombra roja puede que no fuera memorable, pero que sin duda es uno de los mejores looks de la actriz.
Imágenes: ZImbio y Style.com
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