No creo ni que pase a la historia ni que fuese la mejor vestida, pero no cabe duda de que su look era impecable. Apostando por una firma poco conocida, la actriz lució un austero vestido azul marino con silueta sirena y dos abullonaduras en los laterales que daban al diseño el perfecto toque de dinamismo necesario para que nos nos durmamos.
Del mismo modo introdujo las joyas de Sutra, que aunque perfectas para el vestido, no terminan de convertirlo en el mejor de la noche. Eso sí, cumplen su función de darle el toque diferente al impecable vestido. Y eso por supuesto lo hacen de manera impecable. Termina su look con un maquillaje y peinado poco novedosos, pero desde luego impecables.
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