Naomi Campbell abría la colección Fall 2013 de Atelier Versace, dando comienzo así al desfile y a la semana de la Alta Costura de París. Y lo hacía por primera vez desde 1997, desde la muerte del diseñador al que tomaría el relevo su hermana Donatella, Gianni Versace. Inauguraba el desfile sexy, como es ella, llevando una chaqueta asimétrica que parecía a punto de deshacerse unida únicamente por unos cristales y que revelaba un sujetador de encaje. No debemos olvidar que hablamos de Atelier Versace, y Donatella entiende la Alta Costura de una manera muy distinta.
Donatella afirmaba que su inspiración llegaba de la fotografía en blanco y negro de los años 30, pero adaptada a nuestro siglo. Lo pudimos ver reflejado en las chaquetas que presentó, con solapas y ajustadas con un cinturón y marcadas hombreras. En negro, burgundy, con cristales o cocodrilo, todo cabe en el mundo Versace.
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La esencia de la casa, las transparencias y el estilo revelador e insinuante, no tardaron en tomar la pasarela. Paneles transparentes, únicamente cubiertos por un delicado encaje; cinturas ceñidas y chaquetas que escondían más bien poco, todo sea por enseñar la piel.
Tampoco debemos olvidar que hablamos de una colección otoño-invierno, y las prendas de abrigo tampoco faltaron. Un abrigo azul eléctrico con insinuantes cortes y una chaqueta estilo 30's como las que ya hemos visto en un azul más oscuro, ambas con detalles de cristales.
Si alguien estaba esperando un gran "Ball gown" se ha equivocado de firma. Semitransparencias, encaje y pliegues que enseñaban más piel protagonizaban las últimas entradas en pasarela.
Insinuantes transparencias marcadas con detalles de cristales en degradé, ya fuesen palabra de honor o con cuello alto, nos adelantaban que factor iba a predominar en las siguientes apariciones: los cristales.
El show casi finalizaba con impresionantes vestidos (eso sí, ceñidos a la silueta de las modelos) con semitransparencias hechas a base de una profusa disposición de cristales, acompañados de encaje, escotes halter y mucho trabajo manual, que nos permite recordar porqué Atelier Versace es Alta Costura.
Casi para finalizar, la modelo Lindsey Wixon lucía mi vestido favorito de la colección, de nuevo lleno de cristales y que enseña más de lo que debería, pero que en Wixon queda perfectamente.
La penúltima salida la ponía Anna Selezneva, con un mono con pantalones decorados con más cristales y una parte de arriba prácticamente nula, únicamente cubierta por el delicado encaje que predonimaba en la colección. Unas cadenas hacían que la parte de arriba no fuese tan reveladora.
De nuevo, la irreverente Diosa de ébano cerraba el desfile ;lleno de fuerza y como de costumbre, un tributo al cuerpo de la mujer; a penas cubierta por encaje, cuero y una chaqueta, demostrando así, que ella, es la mejor.
Afortunadamente, hoy aun nos quedan los desfiles de Christian Dior y Giambattista Valli.
¿Qué os ha parecido? ¿Estaba a la altura de la Alta Costura?
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