Tenía el mal presentimiento de que, por alguna razón, Jessica Chastain no iba a estar a la altura con su look para la Ceremonia de Apertura. Y en cierto modo, mis temores se han hecho realidad, porque por mucho que me duela, este vestido no está a la altura de las circunstancias.
A estas alturas, Alexander McQueen ha explotado tanto este tipo de vestidos que, por impresionantes que sean los bordados cosidos a mano, más que entusiasmo lo único que este vestido de la colección Pre-Fall 2017 consigue desprender es una tremenda sensación de cansancio.
Ni la silueta ni los bordados aportan nada nuevo al género, y mientras que el diseño se ajusta como un guante. no es suficiente como para que esto lo convierta en un ganador. No en la Ceremonia de Apertura de Cannes.
Los tonos que han elegido para el maquillaje le apagan mucho la cara, y el collar de Piaget no consigue encajar con el vestido sin parecer antes una excusa para tratar de realzar un look que, tristemente, no es ni la mitad de especial que la persona que lo luce.
La actriz tendrá diez días para redimirse. Esperemos que no nos decepcione.
Imágenes: Zimbio y Style.com
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