Olivia Wilde fue la última y tercera embarazada de la noche, y sin duda, fue la que mejor supo lucir el embarazo. Escogió un sobrio vestido negro de cuello alto y sin mangas que bueno, no resulta una apuesta ni arriesgada ni innovadora, pero teniendo en cuenta su estado (y los looks de Kerry Washington y Elsa Pataky) me parece digno de estar entre las mejores.
Sin embargo, en la espalda nos encontramos con un discreto escote y una franja blanca que hacen de este diseño algo más interesante y no lo convierte en un simple vestido negro más.
Pero sin duda la mejor parte del look son su maquillaje y peinado, donde la actriz consigue estar realmente favorecida. Sobre todo en el maquillaje, destacando fuertemente una seductora mirada frente a un acabado natural para el resto del rostro. Para el peinado, optó por un recogido que le permitía así lucir el lazo que tenía el cuello en su espalda.
La actriz temrina su look con joyas de Lorraine Schwartz y clutch y zapatos de Jimmy Choo.
Imágenes: Zimbio y Style.com
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