Kristen Wiig acudía a la Premiere en Nueva York de "Anchorman 2: The Legend Continues", y lo hacía pisando la alfombra roja con una apuesta nada fácil, que además no firmaba otra casa que Prada conocida por conseguir desastres estrepitosos (siempre queda el caso de Anne Hathaway en los Oscar 2013, aunque yo sigo pensando que tampoco fue un look tan malo) o aciertos impresionantes (Lupita Nyong'o sabe de que hablo) en alfombra roja, ya que no presenta vestidos largos en sus colecciones y todos son custom-made.
El look de Kristen es de esos que o los odias, o te encantan, y yo tengo la suerte de figurar entre las personas de la segunda lista, que apuesto a que son pocas.
Me encanta el diseño, porque aporta un soplo de aire fresco a la alfombra roja, como suele hacer Prada, ofreciendo un look diferente, más complicado de lo habitual y que sin embargo, Kristen sabe sacar muy bien adelante. La estructura del vestido es compleja, con mangas murciélago, y fruncidos en el abdomen decorados con aplicaciones, que también vemos en el cuello y las mangas y un toque de color salmón que contrasta con la frialdad del gris cayendo a los laterales del diseño. Para mi, todo encaja.
Por supuesto, su look de belleza también es impecable, con el pelo retirado hacia atrás en un nuevo color y un maquillaje centrado en los labios, destacando en un precioso tono rojo.
Como ya he dicho, para mi, es un total acierto y un look que merece ser
recordado, ya sea para bien o para mal.
Imágenes: Zimbio
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