Tengo que admitir que nunca había pensado que Juliette Binoche pudiera llegar a crear un look tan impactante, pero una vez demostrado su entusiasmo por el mundo del moda escogiendo creaciones que van desde Schiaparelli a Balenciaga, parecía cuestión de tiempo que llegara el momento en el que todo se parara al pisar ella una alfombra roja.
Lo que más me chocó en un principio es que la actriz modificara el vestido respecto a la pasarela de la colección Fall 2015 Couture para añadir un profundísimo escote, sin el cual, por otro lado, el look no habría conseguido el mismo impacto, porque a pesar de que el entramado de aplicaciones con el degradado a negro es increíble y se ajustaba a su silueta de manera perfecta, necesitaba algo más que le aportara ese punto inolvidable.
Las joyas de Chopard aportaban ese toque de glamour que no puede faltar en un Festival de cine y suponían el complemento perfecto, que terminaban uno de los mejores looks de esta edición.
Imágenes: Zimbio y Vogue
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